Las asociaciones de Euskal Herria que difunden la campaña «Escuela sin WiFi», alertan de los riesgos de este sistema y defienden una escuela saludable, que pueda conectarse a Internet por cable o fibra óptica.
En 2009 se puso en marcha el plan Eskola 2.0 y con ello la implantación de la tecnología WiFi en las aulas, para que los alumnos puedan acceder a Internet con sus portátiles. Paralelamente, comenzó la campaña «Escuela sin WiFi», en la CAV, promovida por colectivos adscritos a la Coordinadora Vasca de Afectados por Campos Electromagnéticos EKEUKO-COVACE y en Nafarroa, por ASANACEM/EEKN, la Asociación de Afectados por Campos Electromagnéticos.
Ambas asociaciones, COVACE el pasado jueves en Bilbo, junto con Ekologistak Martxan, y ASANACEM, ayer en Burlata, alertaron a las madres, padres, profesorado, y en definitiva, a la sociedad en general, del riesgo que supone para los niños, niñas y adolescentes estar expuestos a las radiaciones WiFi de forma continuada en las aulas durante todo el curso escolar.
Recordaron que organismos del ámbito internacional, como la Organización Mundial de la Salud o el Consejo de Europa, clasifican estas radiaciones como «posibles cancerígenas» y recomiendan que en las aulas se acceda a Internet por cable y se evite el sistema WiFi para proteger la salud de los menores. A su vez, el mismo Consejo, instó a los gobiernos europeos a aplicar el Principio de Precaución especialmente en la población infantil y juvenil.
En base a esos criterios, ambas asociaciones explicaron la campaña «Escuela sin WiFi». En la misma, reivindicaron el derecho a la salud de las personas, y también solicitaron poner fin a la manipulación mediática de la información sobre los riesgos para la salud de los campos electromagnéticos.
De esta manera, insistieron en la necesidad «urgente» de aplicar el Principio de Precaución y de evitar «toda radiación por todos los medios técnicamente posibles». Además, reivindicaron la especial protección de los menores y de todos los demás colectivos especialmente vulnerables en los centros escolares, señalando que «las aulas de Euskal Herria tienen que ser zonas blancas, libres de toda contaminación, incluida la de campos electromagnéticos».
Por ello, hicieron un llamamiento a la sociedad en general para que se movilice en defensa de la salud en los centros de enseñanza e instaron a los gobiernos a sustituir los sistemas WiFi por conexiones por cable o fibra óptica.
Ambas asociaciones expusieron también una serie de consejos para proteger la salud de los niños y niñas con respecto a las radiaciones. Así, recomendaron usar internet por cable, para evitar la fuerte radiación del WiFi. Además, desaconsejaron el uso del teléfono móvil en espacios cerrados o vehículos, y cuando haya niños y niñas cerca.
En el hogar, recomendaron sustituir el teléfono inalámbrico por uno con cable y en cuanto a los móviles, recordaron que según los científicos, se aconseja no hablar más de tres minutos por estos. Por otro lado, recordaron que al enviar mensajes de texto por el móvil, es recomendable apartar el teléfono del cuerpo todo lo posible. Finalmente, aconsejaron no dejar nunca el móvil encendido por la noche y menos cerca de la cabeza.
http://www.gara.net/paperezkoa/20120108/314089/es/La-campana-Escuela-sin-WiFi-alerta-riesgos-e-insta-usar-cable-o-fibra-opticaAmbas asociaciones, COVACE el pasado jueves en Bilbo, junto con Ekologistak Martxan, y ASANACEM, ayer en Burlata, alertaron a las madres, padres, profesorado, y en definitiva, a la sociedad en general, del riesgo que supone para los niños, niñas y adolescentes estar expuestos a las radiaciones WiFi de forma continuada en las aulas durante todo el curso escolar.
Recordaron que organismos del ámbito internacional, como la Organización Mundial de la Salud o el Consejo de Europa, clasifican estas radiaciones como «posibles cancerígenas» y recomiendan que en las aulas se acceda a Internet por cable y se evite el sistema WiFi para proteger la salud de los menores. A su vez, el mismo Consejo, instó a los gobiernos europeos a aplicar el Principio de Precaución especialmente en la población infantil y juvenil.
En base a esos criterios, ambas asociaciones explicaron la campaña «Escuela sin WiFi». En la misma, reivindicaron el derecho a la salud de las personas, y también solicitaron poner fin a la manipulación mediática de la información sobre los riesgos para la salud de los campos electromagnéticos.
De esta manera, insistieron en la necesidad «urgente» de aplicar el Principio de Precaución y de evitar «toda radiación por todos los medios técnicamente posibles». Además, reivindicaron la especial protección de los menores y de todos los demás colectivos especialmente vulnerables en los centros escolares, señalando que «las aulas de Euskal Herria tienen que ser zonas blancas, libres de toda contaminación, incluida la de campos electromagnéticos».
Por ello, hicieron un llamamiento a la sociedad en general para que se movilice en defensa de la salud en los centros de enseñanza e instaron a los gobiernos a sustituir los sistemas WiFi por conexiones por cable o fibra óptica.
Consejos útiles
En el hogar, recomendaron sustituir el teléfono inalámbrico por uno con cable y en cuanto a los móviles, recordaron que según los científicos, se aconseja no hablar más de tres minutos por estos. Por otro lado, recordaron que al enviar mensajes de texto por el móvil, es recomendable apartar el teléfono del cuerpo todo lo posible. Finalmente, aconsejaron no dejar nunca el móvil encendido por la noche y menos cerca de la cabeza.